Con el lápiz en la mano, el papel en frente, mirando, pensando, oyendo, distrayéndome  obligándome a pensar en algo coherente, ideas vagas, ganas de escribir, de escribir, de escribir, pero solo eso, no pienso en nada. puedo decir lo que veo. para que todos lo hagan, pero no quiero, no quiero compañía en este momento, no quiero que alguien me acompañe mirando lo que yo. la verdá tampoco se lo que quiero.
Me gustaría tener el poder de sacar las palabras, sin pensar en nada mas que eso.
se que diría algo interesante, algo qu entraría en la vida de otra persona, mas que en la mía  pues las palabras que salen de mi, es porque no las quiero, porque no las necesito, porque las quiero dejar en otro lugar, para que se vayan de mi mente, debe ser esa la razón por la que cuando pienso tanto escribo tanto, aunque no escriba algo relacionado a lo que piense. de todas formas. me libera escribir. quizás sacando palabras, me siento aliviada. mas tranquila, pero si hay algo que se, es que al escribir no pienso en nada mas, y eso, ya es tranquilidad, para mi mente abrumada de ideas.
ahora escribo, hoy escribo. porque he pasado mucho rato sola. mucho rato para tener ideas. y se que si algún dpia descubro la manera de ver, pensar, y decir. de mi saldrá una madeja, gigante. como las de la señora. que no recuerdo el nombre, pero que tejía frazadas de lana.