martes, 14 de abril de 2015

Puede que me veas como una niña, en el fondo a los 22 años se que siempre lo seré.
pero si soy tu madre es porque vivi mucho tiempo antes que tu, para enseñarte algo. me pregunto dónde andará tu alma hoy? probablemente seas la mirada del anciano en la micro, la sonrisa del niño en brazos, el aliento de quien se acerca en mis peores momentos.
Si eres de mi sangre, entonces seguramente ahora estás en un mundo muy diferente al mio, pues aún no ha llegado el tiempo ni el momento en que tu puedas enseñarme lo que vienes a entregarme.
Pero yo se que ya lo estás trabajando. No existe diferencia de edad, solo diferencia de experiencias, yo te enseño lo que se, tu me regalarás hermosas cosas y lo se desde que supe que existirías en mi vida.

Estoy creciendo para que cuando llegue el momento, puedas utilizarme como el instrumento que Dios quiere que sea para ti.
y por eso es que registro cada palabra que sale de mi corazón, mi vida la vivo con mucho amor pensando en ser tu guía cuando me necesites.

para eso te escribo, para que sientas que estoy a tu lado desde mucho antes que existieras en mi vida, eres mi centro, y siempre lo serás.

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